Un hedge fund es uno de los tipos de fondos de inversión más especiales y polémicos que hay en el mercado. Su traducción literal al castellano es la de fondo de cobertura, un nombre que les viene por su capacidad de ganar en cualquier situación del mercado, por lo menos en teoría.
Su mala fama tiene más que ver con su capacidad de tomar posiciones cortas. Es decir, ganar dinero si una u otra acción e incluso el mercado entero, caen. En este post te lo contamos todo.
Hedge fund: qué son
Es imposible dar una definición cerrada de un hedge fund. La Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) se refiere a ellos como fondos de inversión libre, debido a su mayor libertad de operación.
A los hedge funds también se les conoce como fondos de inversión alternativos o de alto riesgo.
En definitiva, lo que define a este vehículo de inversión es que siempre trata de buscar un retorno absoluto de la inversión. Es decir, su objetivo es maximizar la rentabilidad que obtiene sin importar la situación del mercado. Tienen mayor flexibilidad para invertir que los fondos de inversión tradicionales.
Esto se traduce en que buscará ganar dinero en mercados alcistas y también bajistas asumiendo posiciones cortas, entre otro tipo de estrategias. Para poder hacerlo, apenas tienen limitaciones sobre los activos en los que pueden invertir y el porcentaje que destinan a cada uno de ellos.
Por ejemplo, podrían concentrar todo su capital en un único activo, como por ejemplo Bitcoin o la típica acción que esté de moda.
La libertad de actuación es precisamente la principal diferencia entre los hedge fund y los fondos de inversión corrientes.
Un fondo de inversión tradicional no tiene capacidad para tomar posiciones cortas y usar determinadas estrategias de inversión, la normativa que los regula los limita en este sentido. Además, tienen que cumplir unos parámetros de diversificación de cartera, no pueden utilizar apalancamiento y calculan el valor liquidativo diariamente.
Características de los hedge funds
¿Qué define a un hedge fund? Las principales características de este tipo de fondos de inversión pasan por:
- Comisiones elevadas: hasta el máximo permitido en el caso de los hedge funds españoles. Este tipo de fondos cobran normalmente una comisión de gestión a la que se suma una comisión de éxito. Es decir, que el fondo también cobrará un porcentaje del beneficio que logre.
- Operativa en corto: es una de las ventajas de esa libertad de gestión. La mayoría de hedge funds toman posiciones cortas.
- Utilizan apalancamiento: esta es otra de las señas de identidad de los fondos de inversión libre. Aprovechan productos apalancados para invertir.
- No cuentan con un benchmark o índice de referencia: Normalmente son fondos de retorno absoluto, que buscan conseguir rentabilidad independientemente de la dirección o condiciones del mercado. No tienen índices de referencia con los que puedan compararse porque sus estrategias son complejas.
- Liquidez limitada: ya que no tienen que calcular el valor liquidativo de sus activos a diario. De hecho, algunos hedge funds lo hacen sólo de forma mensual y solo permiten retirar el dinero en días concretos del mes.
Al final los hedge fund buscan aprovechar ineficiencias del mercado para generar rendimientos superiores.
¿Cómo surgen los hedge funds?
¿Por qué surgen los fondos de inversión libre? El primer hedge fund se creó en 1949 de la mano de Alfred Winslow.
Winslow desarrolló una estrategia para cubrirse frente a los movimientos del mercado. En concreto, diseñó una cartera con posiciones cortas y largas, aprovechando el apalancamiento para maximizar sus resultados.
El propio Alfred Winslow le dio el nombre de Hedged Fund, que después se resumió a Hedge Fund, por la capacidad de cubrirse ante los mercados alcistas y bajistas. De ahí que se llamen también fondos de cobertura.
La estrategia dio buenos frutos y otros gestores la imitaron, en parte por los resultados y porque desde 1952 Winslow pasó a reducir las comisiones del fondo (debido a que los costes de inversión eran más limitados), pero también pasó a cobrar un 20% de comisión por resultados.
La industria de fondos de inversión libres siguió evolucionando y haciéndose más grande. Hoy en día atrae a muchos grandes inversores privados por los beneficios potenciales que pueden lograr. Eso sí, al usar el apalancamiento han sido protagonistas de grandes fiascos y algunas quiebras sonadas.
Tipos de hedge fund
Los hedge funds son muy heterogéneos. La libertad que tienen les permite seguir diferentes estrategias de inversión:
- Crecimiento: son los más parecidos a los fondos de inversión tradicionales. Invierten en acciones que esperan que crezcan.
- Direccionales: son fondos que invierten según la tendencia del mercado. Cuando el mercado sube toman posiciones largas y cuando baja o piensan que habrá caídas, toman posiciones cortas.
- Emergentes: se trata de un tipo de hedge fund que invierte principalmente en mercados emergentes.
- Arbitraje: esta estrategia busca aprovechar las ineficiencias del mercado. En concreto, buscan tomar posiciones cortas en mercados caros y largas en mercados baratos. Dicho de otra forma, si creen que el precio de un activo es elevado, apuestan en su contra y si piensa que está barato, compran esperando a que suba.
- Global Macro: estos fondos invierten siguiendo tendencias globales. Busca beneficiarse de los cambios de tipos de interés, divisas y materias primas.
- Distressed: se trata de un modelo de hedge fund que invierte en compañías con dificultades económicas a punto de quebrar.
- Long/Short: son una tipología de hedge fund que invierte a corto y a largo en valores correlacionados para sacar partido de la diferencia de precios. Un ejemplo sería invertir en corto en una empresa de IA y tomar una posición corta en otra empresa del sector.
- Inversión en valor: es algo que también hacen muchos fondos de inversión tradicionales. El value investing busca invertir en compañías que considera que el mercado no está valorando adecuadamente.
- Event drive: son fondos que invierten según eventos macro o corporativos que pueden afectar al valor de las empresas, como fusiones, adquisiciones, subidas de tipos de interés o reestructuraciones de deuda.
