Seguramente habrás utilizado una tarjeta contactless para los pequeños pagos diarios. Se trata de un sistema de comunicación sin contacto que facilita los pagos simplemente aproximando la tarjeta al punto de venta. Este método de pago utiliza la tecnología NFC y, debido a su comodidad, es cada vez más popular.
Sin embargo, la seguridad sigue siendo un aspecto fundamental, especialmente al tratarse de transacciones con tarjetas contactless. En este artículo, vamos a descubrir cómo funciona el contactless, qué ventajas ofrece, los posibles riesgos que conlleva y cómo podemos afrontarlos.
El contactless es un método de pago que, gracias a la tecnología NFC (Near Field Communications), puedes realizar compras con tarjeta en comercios físicos de forma sencilla y cómoda. Se trata de un sistema inalámbrico que posibilita la transmisión de información entre dos dispositivos situados a distancias muy cortas para así autorizar un pago.
Gracias a esta tecnología, ya no hace falta introducir la tarjeta en el datáfono para comprar, solo es preciso acercar la tarjeta al mismo y el lector detectará la tarjeta para efectuar el pago.
Su principal ventaja es la rapidez, ya que no se basa únicamente en acercar la tarjeta para identificarla, sino que además tampoco es necesario introducir el PIN en compras inferiores a 50 euros.
¿Cómo funciona el pago sin contacto?
El pago sin contacto utiliza la tecnología de identificación por radiofrecuencia (RFID) y la comunicación de campo cercano (NFC). NFC es una tecnología inalámbrica de corto alcance (menos de 10 cm) que conecta Smartphones, tabletas, dispositivos portátiles y tarjetas.
Las etiquetas de radiofrecuencia se incorporan a las tarjetas y los lectores. De esta manera, el lector identifica de manera pasiva (unidireccional) un objeto (como tu tarjeta de crédito) mediante ondas de radio.
Así pues, los Smartphones también tienen un sistema de pago sin contacto y puedes vincularlo con un monedero electrónico para realizar pagos con tan sólo acercarlo a TPV para realizar una compra en un comercio físico.
Ventajas de las tarjetas contactless
En un mundo cada vez más dinámico, las tarjetas contactless surgen como una solución de pago eficiente y versátil que ofrece una serie de ventajas, entre las que podemos destacar:
- Velocidad: La rapidez destaca como el atributo estrella de este método de pago. La capacidad de concluir una transacción en cuestión de segundos agiliza las operaciones comerciales y ahorra valioso tiempo a los usuarios.
- Comodidad: Cada vez más personas optan por dejar de llevar consigo tarjetas físicas y eligen utilizar dispositivos como smartwatches. Esta tendencia es especialmente beneficiosa al viajar al extranjero, simplificando aún más la experiencia de pago.
- Seguimiento: La facilidad para rastrear y revisar transacciones a través de registros electrónicos ofrece un nivel de detalle que puede ser beneficioso para el usuario que quiere tener un control de sus finanzas.
Riesgos de las tarjetas contactless
Aunque las tarjetas contactless mejoran la experiencia del usuario y aceleran las transacciones, es importante reconocer los riesgos asociados para utilizarlas de la manera más segura posible:
- Eavesdropping: el término se traduce como “escuchar en secreto” y define el riesgo de que, en ciertas circunstancias, la información de tu tarjeta contactless se envíe sin verificar si el dispositivo que la recibe es legítimo o no. Esto podría ser un problema de seguridad, ya que alguien malintencionado podría obtener esos datos y usarlos para hacer compras online.
- Fraudes de proximidad: Los delincuentes utilizan dispositivos de lectura de radiofrecuencia para poder robar información de las tarjetas. Y todo esto mientras estas se encuentran dentro de las carteras o bolsillos de las personas. Esta técnica es conocida como skimming, y puede permitir a los delincuentes realizar compras fraudulentas tanto en internet como físicas.
- Robos físicos: Incluso sin llegar a realizar pagos sin contacto, estas tarjetas pueden ser robadas de forma física y el delincuente podrá realizar compras fraudulentas en tiendas físicas. Esto se debe a que el sistema de pago contactless admite compras de pequeño importe sin la necesidad de ingresar un código PIN de la tarjeta.
¿Cómo proteger mi tarjeta contactless?
Debido a estos posibles riesgos que conlleva el uso de las tarjetas contactless, es importante incrementar la seguridad al usarlas. Estas son algunas indicaciones que te ayudarán a minimizar el riesgo de fraude:
- Ajusta el límite máximo para solicitar el código PIN, de esta manera refuerzas la seguridad al usar tu tarjeta contactless. Aunque el límite predeterminado en España es de 50€, la mayoría de los bancos ofrecen la flexibilidad de establecer límites más bajos. Fijar el límite en 5 o 10 euros o incluso configurarlo para solicitar siempre el código PIN puede reducir el riesgo de utilizar la tarjeta contactless.
- Utiliza una funda de protección RFID para bloquear la señal, impidiendo su uso no autorizado. Además, algunas carteras tienen protección RFID, lo cual es una forma de resguardar todas nuestras tarjetas. Esto es muy recomendable cuando nos preocupa que nos acerquen un dispositivo de lectura de radiofrecuencia para robar la información de nuestra tarjeta.
- Puedes activar o desactivar tu tarjeta de una forma sencilla a través de la aplicación móvil de tu banco. De este modo, podrás desactivarla en situaciones de posible robo o sencillamente mantenerla desactivada y únicamente activarla para realizar compras.
- Utiliza el PIN de confirmación: de forma que la tarjeta solicite el PIN después de un número de transacciones determinado. De esta forma añades más seguridad y evitas que utilicen tu tarjeta para hacer compras sin tu consentimiento.
- Activa el envío SMS al pagar: si recibimos un SMS de confirmación de compra y no hemos sido nosotros, sabremos que estamos ante un posible fraude.
- Revisa con regularidad el estado de tus cuentas para detectar posibles usos indebidos de tus tarjetas. Así podrás identificar a tiempo si ha habido alguna compra realizada sin tu consentimiento.
- Pagar con contactless a través del móvil: debido a que ofrece niveles de seguridad más altos. Los móviles suelen utilizar métodos de acceso como códigos numéricos, patrones o Face ID para mayor seguridad.
Conclusiones
En síntesis, el uso de la tecnología NFC, utilizada para realizar pagos sin contacto, ha ganado popularidad gracias a la agilidad en los pagos, comodidad y rapidez en las transacciones.
No obstante, aunque ofrece ventajas significativas, como la agilidad en los pagos, también presenta riesgos de seguridad.
Para utilizar tarjetas contactless de forma segura, puedes tomar algunas medidas, como ajustar los límites de gasto, utilizar fundas RFID, activar o desactivar la tarjeta según sea necesario y aprovechar funciones de la aplicación móvil de tu banco, como el envío de SMS al pagar.
