Los fondos indexados son fondos de inversión que tienen una política inversora particular: reproducen el comportamiento de un índice de mercado, como el Ibex 35 o el S&P 500. De esta forma, construyen su cartera de activos basándose en su índice de referencia y no suelen cambiarla, más allá de realizar los ajustes periódicos pertinentes.
Por tal razón, a esta forma de gestionar una cesta de activos se le denomina “gestión pasiva” y ofrece una serie de ventajas.
¿Qué son los fondos indexados?
Un fondo indexado es aquel que permite a los inversores tomar exposición a todo un mercado, sin más. Su cartera está compuesta exactamente igual que un índice.
Un índice bursátil es una media de las principales acciones que cotizan en una determinada Bolsa de Valores. Precisamente se crean para medir el comportamiento del mercado en general, puesto que toman los activos más representativos.
Por ejemplo, el S&P 500 es un índice que recoge las 500 empresas más grandes de Estados Unidos que cotizan en bolsa.
Los índices también sirven para comparar la evolución de una determinada acción o cesta de acciones con respecto al mercado de referencia. Así pues, podemos saber si un activo está más fuerte o más débil que el mercado en general.
Pero, ¿y si en lugar de intentar superar al mercado nos indexamos a él? Es decir, invertiremos siguiendo su comportamiento y no pretendemos superarlo. Para este fin fueron creados los fondos indexados.
¿Cuáles son las ventajas de los fondos indexados?
La primera ventaja que se consigue a través de la inversión indexada es que, al igual que no podemos superar la rentabilidad del índice de referencia, tampoco podemos tener una menor. Se trata de fluir con el mercado, lo cual puede limitar las ganancias, pero también las pérdidas.
Las estrategias de gestión pasiva ofrecen ciertos beneficios al inversor:
- Son baratas: dado que no es necesario un equipo de analistas y el trabajo del gestor es sencillo; simplemente es construir la cartera tal cual está compuesto el índice de referencia. Esto se traduce en menores comisiones para el inversor.
- Pueden utilizarse a través de ETFs: los ETFs son fondos de inversión cotizados y la mayor parte de ellos utilizan estrategias indexadas. Para invertir en ETFs tan sólo tienes que comprar las participaciones en una Bolsa de Valores, pero existen brókers que te permiten comprar fracciones. Por consiguiente, puedes invertir en ETFs desde 1 €.
- Son fáciles de seguir: saber la rentabilidad del fondo es tan simple como atender a la evolución de su índice de referencia.
La estrategia de inversión es transparente: puedes saber en todo momento cómo está compuesta la cartera. Todos los datos son públicos y pueden consultarse a tiempo real. - Diversificación: un índice está compuesto por un conjunto de valores pertenecientes a diferentes sectores de la economía de un país. Es igual que invertir en todas las acciones al mismo tiempo. Incluso existen índices mundiales o que abarcan diferentes zonas geográficas.
- Fácil acceso: puedes invertir en toda una cesta de valores con una inversión mínima y de un modo sencillo.
- Puedes rotar de mercado con facilidad: si un índice no se comporta como esperabas, puedes cambiar tu inversión y traspasar el capital hacia otros fondos indexados con facilidad. Además, sin tener que pagar impuestos por este cambio.
- Son útiles para inversiones a largo plazo: según estudios (concretamente de Jeremy Siegel), los mercados tienden a crecer a largo plazo. Lógicamente, la economía crece y evoluciona.
¿Cómo invertir en fondos indexados?
El proceso de inversión en fondos indexados es exactamente el mismo que cualquier otro fondo de inversión tradicional. Es decir, comprar participaciones a la gestora o a algún agente que se encarga de comercializarlo (como un banco o una plataforma especializada).
Quizá, este tipo de fondos sean más sencillos de analizar, debido a la transparencia de la estrategia que siguen. No obstante, es preciso estimar la evolución del mercado al cual están expuestos, ya que si inviertes en el índice de un país y este se enfrenta a dificultades político-económicas, podrías sufrir graves pérdidas.
Además de comprar fondos indexados de forma individual, existen planes de inversión compuestos por estos productos. Es decir, carteras de fondos indexados creadas por un gestor financiero automatizado o robo advisors.
Suele haber una estrecha relación entre los robo advisors y los fondos indexados, dado que los primeros se sirven de este tipo de productos de inversión para crear planes personalizados.
Si invertir en fondos indexados es sencillo, hacerlo a través de un robo advisor lo es más. Es una herramienta muy simple, como te explicamos en este artículo.
De cualquier modo, para invertir en cualquier fondo de inversión es necesario leer y estar informado correctamente sobre el producto. Por ejemplo, en el caso de los fondos indexados, existen conceptos tales como el “tracking error” (desviación de la rentabilidad del fondo con respecto a su índice de referencia) que resultan relevantes.
En Mastering Money te mostramos todo lo que necesitas saber para invertir en fondos indexados como un experto. Además de las novedades de la industria y los productos más destacados.
