La doctrina del paréntesis ofrece a los trabajadores la posibilidad de cumplir con el periodo de carencia necesario para acceder a la pensión de jubilación, incluso después de haber dejado de cotizar durante un tiempo.
En este artículo descubriremos en qué consiste la doctrina del paréntesis, quiénes pueden beneficiarse de ella y cuáles son los requisitos para solicitarla.
¿Qué es la pensión de jubilación?
El objetivo de la pensión de jubilación es cubrir la pérdida de ingresos que tiene una persona cuando deja de trabajar al llegar a la edad establecida y, por tanto, finaliza su vida laboral.
Para poder acceder a esta pensión, es necesario que se cumpla el requisito de carencia genérica (período total de cotizaciones realizadas al sistema durante la vida laboral, el cual requiere un mínimo de 15 años cotizados) y de carencia específica (período de cotización más reciente al momento de la pensión, que exige que se hayan cotizado al menos 2 años dentro de los últimos 15 años anteriores al momento en el que tienes derecho a comenzar a recibir tu pensión de jubilación).
¿Qué es la doctrina del paréntesis?
La doctrina del paréntesis es una regla que te ayuda a obtener una pensión de jubilación más justa cuando no has podido cotizar debido a circunstancias ajenas a tu voluntad, como puede ser el desempleo u otra situación análoga.
En la práctica significa que los años en los que no pudiste hacer contribuciones “se pondrán entre paréntesis” y no se tendrán en cuenta al calcular tu pensión.
Por ejemplo, imagina que has estado desempleado durante los últimos 4 años antes de jubilarte. En este caso, la doctrina del paréntesis te beneficia al no considerar ese período sin cotizaciones, lo que facilita que puedas recibir el 100% de tu pensión merecida.
En los últimos años, la jurisprudencia ha desarrollado esta doctrina del paréntesis para ayudar a las personas a cumplir con los requisitos de cotización necesarios para acceder a su pensión de jubilación, especialmente te ayuda a cumplir con el requisito de carencia específica. Esta regla se ha convertido en parte de la Ley General de la Seguridad Social (artículo 205.1 b).
¿Quién puede beneficiarse de la doctrina del paréntesis?
A continuación, se mencionan algunos colectivos a los que puede ayudar la doctrina del paréntesis:
- Personas que han estado en paro involuntario sin recibir subsidio, siempre que estén registradas como demandantes de empleo de manera continua.
- Personas que estuvieron en una situación de invalidez provisional sin la obligación de cotizar.
- Aquellas que recibieron una pensión no contributiva de invalidez.
- Personas que pasaron tiempo en prisión y se alejaron del mercado laboral, pero mostraron disponibilidad para trabajar mientras cumplían condena.
- Individuos que enfrentaron una enfermedad grave que los llevó a no poder cotizar, y esta situación se relaciona con la causa de su inactividad laboral.
Estos son algunos ejemplos de situaciones en las que la doctrina del paréntesis puede aplicarse. Sin embargo, hay otras circunstancias similares que también podrían justificar su uso, dependiendo de las particularidades de cada caso.
La clave es que estos lapsos sin cotizaciones hayan sido provocados por razones fuera del control del interesado, lo que hace que la doctrina sea una opción justa para garantizar su derecho a una pensión de jubilación adecuada.
¿Cuáles son los requisitos para solicitar la doctrina del paréntesis?
Para poder solicitar la doctrina del paréntesis en tu jubilación, es necesario cumplir con ciertos requisitos. El principal es haber cotizado al sistema de seguridad social durante al menos 15 años.
Además, debes asegurarte de tener al menos 2 años de cotización dentro de los últimos 15 años previos a la solicitud de la jubilación.
Es esencial demostrar que no pudiste cotizar debido a circunstancias ajenas a tu voluntad. Esto podría incluir situaciones como estar inscrito como demandante de empleo en el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) pero no poder encontrar trabajo.
¿Qué sucede si no se ha cotizado durante los últimos 15 años?
Cotizar es esencial para poder recibir una pensión de jubilación en el futuro. Si has dejado de cotizar durante un periodo de 15 años o más, pierdes tu derecho a recibir una pensión de jubilación.
Ahora bien, es importante aclarar que la doctrina del paréntesis no es lo mismo que la integración de lagunas. La integración de lagunas se refiere a un proceso en el cual, si en el período que se utiliza para calcular la base reguladora de la pensión de jubilación hay meses en los que no se ha tenido la obligación de cotizar, se aplican ciertas reglas. En este caso, se integran las primeras 48 mensualidades con la base mínima de cotización vigente en ese momento, y el resto de los meses se integran con el 50% de esa misma base mínima.
Conclusiones
La pensión de jubilación es un beneficio fundamental para las personas que han dedicado su vida laboral al trabajo. Para acceder a ella, se requieren años de cotización, siendo 15 años el mínimo necesario. Sin embargo, la doctrina del paréntesis es un recurso legal que puede ayudar a aquellos que, debido a circunstancias ajenas a su voluntad, no han podido cotizar durante ciertos periodos.
Esta regla permite poner entre paréntesis los años sin cotización, lo que facilita el acceso a una pensión de jubilación más justa. Para solicitarla, debes cumplir con los requisitos de 15 años de cotización, con al menos 2 años en los últimos 15 años anteriores a la solicitud, y demostrar que no pudiste cotizar debido a circunstancias ajenas a tu voluntad.
