En la actualidad, hay una amplia gama de opciones para realizar pagos más allá del uso de tarjetas bancarias, como los monederos digitales a través de aplicaciones móviles. Sin embargo, en España, la mayoría de los pagos en los comercios todavía se realizan con dinero en efectivo.
Y para conseguir efectivo lo más habitual es recurrir a los cajeros automáticos o ATM. Sin embargo, aunque el proceso es bastante sencillo, puede resultar un tanto abrumador, especialmente si te enfrentas a un cajero desconocido o si es nuestra primera vez. A continuación, te explicaremos detalladamente cómo utilizarlos.
¿Qué es un cajero ATM?
ATM son las siglas en inglés de Automated Teller Machine, que se traduce al castellano como cajero automático. Es un dispositivo informático que permite realizar operaciones financieras sin la necesidad de la presencia de un empleado del banco.
Así, todos los cajeros automáticos te permiten retirar dinero en cualquier momento del día, y muchos también te permiten realizar depósitos.
Pero aunque su función principal ha sido desde sus inicios la de sacar dinero en efectivo, los cajeros han evolucionado para ofrecer una variedad de servicios. En la actualidad, en algunos cajeros automáticos puedes imprimir estados de cuenta, verificar saldos, transferir dinero entre cuentas e incluso pagar recibos.
¿Cómo funciona un cajero ATM?
Para comprender el funcionamiento de un cajero automático, es importante familiarizarse con sus componentes básicos. Un cajero automático consta de:
- Pantalla y teclado: es lo que nos permite interactuar con el cajero automático, seleccionar las opciones necesarias y marcar la información necesaria.
- Ranura para tarjetas: donde insertamos nuestra tarjeta de débito o crédito para operar. En algunos cajeros también tendremos la opción de utilizar tarjetas contact-less con solo acercarlas a la zona de lectura.
- Dispensador de efectivo: la trampilla por donde sale el dinero.
- Lector de cheques y cajetín de billetes: algunos cajeros automáticos tienen la capacidad de leer cheques o de recibir depósitos en efectivo.
En este sentido, como hemos mencionado, dependiendo del cajero automático y la entidad bancaria se pueden realizar diversas operaciones, como:
- Ingresar y/o retirar efectivo.
- Actualizar libretas.
- Obtener y cambiar la contraseña de la tarjeta.
- Revisar el estado de tu cuenta.
- Transferir dinero.
- Pagar recibos de servicios públicos y privados.
- Contratar productos financieros.
- Recargar tarjetas telefónicas.
¿Cómo sacar efectivo en cajeros ATM?
Como mencionamos anteriormente, todos los cajeros automáticos permiten sacar efectivo, pero te recomendamos utilizar los cajeros de tu propio banco o de entidades con las que tengan un acuerdo para evitar comisiones.
Y es que, aunque actualmente la entidad propietaria del cajero no puede cobrar una comisión directamente al cliente, puede repercutirla a la entidad emisora de la tarjeta, quien a su vez podría cobrártela.
Además, será en un cajero ATM de tu propio banco en el que tendrás todos sus servicios. De esta forma, es conveniente tan sólo acudir a un cajero que no pertenezca a tu entidad sólo en casos de necesidad.
En lo que concierne a sacar efectivo, te contamos los pasos necesarios; ten en cuenta, eso sí, que cada cajero puede funcionar de una forma particular, y quizás no siga este mismo orden:
- Introduce la tarjeta según la orientación indicada en el cajero. Si el cajero permite el uso de tarjeta contactless, simplemente acerca tu tarjeta al sensor NFC del cajero.
- La pantalla te pedirá que ingreses tu código PIN. Si no lo recuerdas, puedes pulsar la tecla cancelar para expulsar la tarjeta. No introduzcas el código varias veces si no estás seguro, ya que podrías bloquear el acceso y hacer que el cajero “se trague” la tarjeta.
- Posteriormente, la pantalla te pedirá que selecciones el tipo de transacción, en este caso, sacar o retirar dinero en efectivo. Si tu tarjeta es de crédito, el cajero puede preguntarte además si deseas sacar dinero de la cuenta corriente o del crédito de la tarjeta (esta opción podría tener un coste).
- Luego, el cajero te pedirá que ingreses la cantidad que deseas retirar. También puedes elegir alguna de las cantidades prefijadas que aparecen en la pantalla.
- Después, el cajero automático te pedirá que confirmes la operación. Es importante revisar cuidadosamente los detalles para evitar errores.
- Mientras el cajero automático procesa tu solicitud y dispensa el dinero solicitado, la pantalla te informará si la entidad emisora de la tarjeta cobrará una comisión por la operación.
- Luego, te dará la opción de imprimir un recibo con los detalles de la transacción realizada.
- Por último, se te preguntará si deseas realizar otra operación. En caso de que no sea así, el cajero expulsará tu tarjeta.
Ten en cuenta que los cajeros automáticos tienen límites del dinero que puedes retirar, establecidos por los propios clientes al abrir la cuenta y en función del contrato de la tarjeta. Este límite puede ser tanto diario como por transacción. Además, la Agencia Tributaria permite una retirada máxima de 3.000 euros del cajero automático.
Recomendaciones de seguridad para sacar efectivo de un cajero ATM
La seguridad es una prioridad fundamental en el diseño y funcionamiento de los cajeros automáticos. La implementación de tecnologías como la encriptación o los sistemas biométricos ha fortalecido la protección de las transacciones y la privacidad de los usuarios. Además, los cajeros automáticos se ubican estratégicamente y están bajo supervisión para disuadir cualquier actividad sospechosa.
A pesar de estos esfuerzos, es importante que tomes ciertas precauciones al usar uno, ya que en ocasiones, aunque raras, pueden ser objeto de manipulaciones fraudulentas.
Al utilizar un cajero ATM, te recomendamos lo siguiente:
- Elije cajeros automáticos que cuenten con vigilancia por vídeo o personal de seguridad, preferiblemente en instalaciones que permitan cerrar las puertas del habitáculo donde se encuentre.
- Antes de realizar la operación, asegúrate de que ningún extraño esté observando cómo sacas el dinero.
- Verifica que no haya ningún material extraño pegado en la ranura donde se inserta la tarjeta, ya que podría tratarse de un dispositivo de skimming, esto es, para robar tus datos.
- Introduce tu clave personal tapando el teclado, para evitar que pueda ser vista por otras personas o alguna cámara.
- Evita llevar anotado tu PIN.
- No aceptes la ayuda o colaboración de extraños en el momento de usar el cajero automático.
Si a pesar de todo tienes cualquier eventualidad con el cajero ATM, comunícate de inmediato con el banco para avisar de la situación y recibir asistencia. Si estás en el cajero de una oficina, y esta está cerrada, en el propio cajero puede aparecer un teléfono de ayuda. Eso sí, asegúrate de sacar tu tarjeta y el dinero antes de alejarte del cajero (aunque el cajero la absorbe ambas cosas a los pocos segundos en caso de que lo olvides).